LA MAÑANA DE LOS REYES,MINUTO A MINUTO...

Nada más despertarse santi pegó un bote de la cama y vino corriendo hacia el comedor,donde ya estaban los regalos preparados bajo el arbol.Su carita rsplandecía y tenía una sonrisa de oreja a oreja.Se acercó al arbol y comprobó que los camellos de los reyes se había bebido el vasito de leche que les dejamos y habían comido casi todas las galletas dejando solo algunos trocitos rotos.Despues empezó a desenvolver los regalos muy nervioso e ilusionado mientras yo le ayudaba y papá grababa con la cámara de video.Era una escena preciosa,en la que podiamos revivir la emoción de cuando éramos niños y disfrutábamos con aquella mañana de reyes...minutos despues se despertó Natalia.La sacamos de la cuna nada más escucharla y la dejamos en el suelo del pasillo para que caminara sola hasta el comedor...estabamos deseando ver su reacción.Natalia apareció en la puerta,miró a su alrededor y se acercó a la mesa,buscando algo (yo sabía que su biberón) y como no lo encontró,se giró hacia el arbol,apartó los regalos y se sentó junto al plato de las galletas y se puso a comerse los trocitos que quedaban.Santi seguía con sus regalos,en concreto con una pizarra que yo enseguida me puse a montarle para que pudiera usarla.Papá llamó a Natalia e intentó que abriera uno de sus regalos pero como ella ni lo miró,le pidió a Santi que lo abriera él por ella.Era la moto de Mickey,tenía una hélice que al darle un botón giraba muy rápido y en la oscuridad brillaba...aquello despertó la curiosidad de Natalia.La llevamos al pasillo y apagamos las luces...y Natalia se quedó embelasada con aquella hélice que no paraba de girar y regalaba aquellas bonitas luces de colores...hubo más regalos,pero solo eso llamó su atención hasta que un rato despues descubrió la pizarra de su hermano.La sorprendí jugando con ella en la habitación mientras preparábamos la mesa y la comida y me llevé una alegría enorme...estaba pintando!! Me acerqué a ella para compartir ese momento y al hacerlo me di cuenta de que Natalia no pintaba.La pizarra tiene un soporte con una especie de lapicero para poner tizas o rotuladores en fila de 8 o 10 y ella estaba poniendo y quitando una y otra vez los rotuladores en fila.Los ponía y los quitaba,los ponía y los quitaba...siempre en el mismo orden.No intentó utilizar ninguno para pintar,no sabía para qué servía la pizarra ni le interesó aprender cuando quise enseñarla...soltó los rotuladores y volvió a su moto del mickey hasta que volví a dejarla tranquila,entonces ella se levantó y siguió haciendo sus filas,sin mi presencia molestándola...
Cuando llegaron mis suegros y mis cuñados...bueno,eso ya lo he contado en otra entrada,los ignoró pacientemente hasta que se marcharon...
Natalia no vivió el dia de reyes como una niña de 19 meses debía haberlo vivido,pese a que sus padres pusimos toda la ilusión del mundo en hacer de las navidades unos dias especiales e inolvidables en sus vidas,siempre hemos querido que disfruten de estas fechas lo máximo posible.Yo me encargo de hacer a través de internet cartas de los reyes que nos envían a casa con el matasellos y el diseño especial para que ellos crean que son reales y las guarden a través de los años,contratamos a papá noel e incluso grabamos un video en el que un papá noel le hablaba directamente a ellos y les pedía que se portaran bien (un mes antes de las fiestas para irlos preparando).Tras la cabalgata de los reyes vamos con unos primos de mi marido a un local de su barrio donde unos vecinos se disfrazan de reyes magos y les hacen una especie de teatro a los niños del barrio para que mantengan viva la ilusión y no se centren solo en los regalos...lo que pretendo decir és que tenía todos los ingredientes para haber disfrutado aquellos dias,como hizo su hermano aquel año y el año que tenía tres y dos años...Santi con la edad de Natalia,justo con 18 meses,celebró su santo con papá y su abuelo (los tres se llaman igual) y abrió los regalos como loco,se emocionó con un dinosaurio enorme que le compraron y decía : !Que gande,que gande!...santi sabía distinguir con 18 meses lo que era grande y pequeño y Natalia con 19 meses no sabía ni lo que era un regalo...pero claro,como todo el mundo me decía,era mejor que no comparara,cada niño tiene su ritmo y su evolución és diferente...pero la evolución de Natalia y Santi era tan diferente...