Educar es lo mismo
que poner un motor en una barca.
Hay que medir, pesar, equilibrar,...
y poner todo en marcha.
Para eso, uno tiene que llevar en el alma
un poco de marino, un poco de pirata,
un poco de poeta
y un kilo y medio de paciencia concentrada.
Pero es consolador soñar, mientras uno trabaja
que ese barco, ese niño, irá muy lejos por el agua.
Soñar que ese navío
llevará nuestra carga de palabras
hacia puertos distantes,
hacia tierras lejanas.
que poner un motor en una barca.
Hay que medir, pesar, equilibrar,...
y poner todo en marcha.
Para eso, uno tiene que llevar en el alma
un poco de marino, un poco de pirata,
un poco de poeta
y un kilo y medio de paciencia concentrada.
Pero es consolador soñar, mientras uno trabaja
que ese barco, ese niño, irá muy lejos por el agua.
Soñar que ese navío
llevará nuestra carga de palabras
hacia puertos distantes,
hacia tierras lejanas.
Esta poesía de Gabriel Celaya es preciosa, me gusta y significa tanto para mi, que el año pasado la añadí a mi discurso de final de curso, cuando mis peques emprendían vuelo hacías las nuevas experiencias del Cole.
ResponderEliminarHace nueve años me costaba comenzar otro curso sin ver las caritas de mis chiquitines del curso anterior, pero poco a poco me he ido haciendo a la idea, y me encanta verles al cabo de los años...
Un besazo guapisima
Cristina, esta es una de mis poesías preferidas; refleja muy bien lo que para mí significa mi profesión a la que llevo entregada 28 años. Me gusta tanto, que es la poesía que elegía para comenzar mi blog de aula de este año y dar la bienvenida a mis alumnos/as http://miblogdesexto.blogspot.com/2010/09/educar-2.html
ResponderEliminarMuchas gracias por compartir esta visión. Besos.
Ayer precisamente releí este corto y sabio texto: "Enseñarás a volar, pero no volarán tu vuelo. Enseñarás a soñar, pero no soñarán tu sueño. Enseñarás a vivir,pero no vivirán tu vida. Sin embargo…en cada vuelo,en cada vida,en cada sueño, perdurará siempre la huella del camino enseñado."
ResponderEliminarUn Besito Marino