En su mismo escrito,Jesús explica como nos conocimos,así que haré solo un breve resumen de ello...hace años,al comienzo de mi blog,recibí un correo de un profesor sevillano que tenía en su aula un nene con posible TEA y me pedía consejo como madre de qué hacer ante sus sospechas... sin dudarlo me puse en contacto con él...y desde entonces hemos mantenido ese contacto sin perderlo.
Para mi es una de las personas mas importantes del colectivo, pues es un docente implicado, siempre formándose, acudiendo a jornadas,apoyando campañas... es una de las personas mas queridas dentro del mundo TEA y un ejemplo para muchísimos maestros.
Lo vive...siente su profesión en el alma y defiende la inclusión como una manera de ejercer derechos para todos,no solo para los niños con NEE sino para toda la sociedad...es de esas personas que piensa firmemente que TODOS SOMOS IGUALES de corazón y lo demuestra dándonos la mano a las familias que luchamos para que un dia esos derechos escritos en un papel sean una realidad,porque hoy no lo son...no lo son.
He tenido la suerte de coincidir varias veces con él en sus visitas a Barcelona y cada vez que nos vemos es una alegría,es de esas personas que és imposible no querer tener en tu vida,por su sensibilidad,su sentido de la justicia hacia los derechos de nuestros hijos y por el cariño que nos demuestra a todos los padres del colectivo que momentos tan dificiles a veces pasamos...él siempre está ahí apoyandonos y dándonos ánimos para continuar.
Gracias Jesús por formar parte de esta campaña...no lo dudé ni por un segundo,sabía que tu nombre saldría aquí,un abrazo.
JESÚS...NATALIA Y LA MAREA AZUL
Hace mucho tiempo que el autismo llegó a mi vida. Justo cuando empecé a hacer mis pinitos como maestro (en prácticas) en las aulas de educación infantil de mi colegio. Me encontré con él, mi niño, quien hizo percatarme que había algo dentro de su cabecita nuevo para mí. Y así empecé un camino de información sobre el trastorno, de conocer a familias, padres y niños que convivían con él, cada una desde su forma de ser, de vivir el día a día, los pequeños logros y las dificultades que se presentaban. De los cientos de blogs que encontré sobre autismo, los dos primeros que visité fueron “El sonido de la hierba al crecer” y “La Princesa de las Alas Rosas”. Después vinieron muchos más, pero ellos fueron los primeros que me mostraron cómo era la vida con el autismo desde dentro. Allí estaba mi pequeña Natalia, una verdadera princesa, no como la de los cuentos de hadas, sino de la vida real: fuerte, luchadora, con un espíritu de superación portentoso. Empecé a leer su vida desde el minuto 1, y conforme iba avanzando supe que, por más retos que la vida le pondría, sabría superarlos con creces. Cada logro era una fiesta, cada dificultad era un proceso que sabía que terminaría bien. Sin conocer a Natalia, empecé a creer en ella y a mostrar un deseo más profundo de formarme. Allí también se encontraba Cris, una mamá de las guerreras, defensora de la inclusión hasta el final. Una vida completamente dedicada a Natalia, a velar por sus derechos y el bienestar de su hija, como muchas otras mamás que forman parte de esta marea azul. A ella me encomendé buscando ayuda para una peque que tenía en mi centro y no tardó en ofrecérmela. Siempre le estaré eternamente agradecido por aquella entrada que escribió sobre los signos de alerta en los niños pequeños. A partir de esa colaboración, el camino siguió ensanchándose gracias al aporte de muchísima gente implicada. Campañas, movimientos a favor de la concienciación, de la información, de la implicación, de incluir a todas las personas. Hemos vivido mucho, hemos luchado mucho, y lo más importante es que nunca bajamos la guardia. Esa es la característica predominante de esta marea azul: nunca se rinde. Pasaron unos años, y el vínculo siguió creciendo hasta el punto de empezar a viajar para conocer, en persona, a estas familias. Y el primer viaje a Barcelona, coincidiendo con una formación de Autismo Diario, pude conocer a mamis tan admirables, entre ellas a Cris. Tan igual como se mostraba en el blog, en ella pude ver a Natalia sin tenerla delante. La voz de Cris era la voz de Natalia. Qué conexión tan perfecta entre madre e hija. Tuve que esperar un año más para conocer a la princesa. Fue un sueño cumplido, fue una realidad oír su voz, cogerle la mano y sentirla. No sabía ni que decir, eran muchos sentimientos encontrados, lo que sí pude comprender que Natalia me había ganado poco a poco con el tiempo, me había hablado a través de la voz de su madre, me había cautivado con tan solo mirarla y me había hecho revivir con tan solo tocarla. Comprendí que todos somos iguales, que todos sentimos y expresamos, de mil maneras distintas, lo que realmente somos. Gracias princesa por darme tanto aquella tarde. Gracias Santi, por cuidarla tanto. Estimado lector, si algún día tienes la suerte de conocer a una persona con autismo, ábrele tu corazón, cree en ella y déjate sorprender. No te arrepentirás. Y al igual con todas. Solo le pido a la vida que me regale algún momento más con Natalia delante. Y poderme sumergir otra vez en su mirada, para conocerla más, para quererla aún más. GRACIAS familia.
GRACIAS A TI,JESUS...ESTA SOCIEDAD NECESITA MAS PERSONAS COMO TU
Resulta muy gratificante haber conocido la trayectoria e implicación de Jesús en las personas afectadas de TEA y sus famiias.
ResponderEliminarUn ejemplo a seguir por otros profesionales, que desgraciadamente no abundan en esta disciplina. Y mi personal felicitación por su profesionalidad, sensibilidad e implicación en su labor.